El logo Jackson Hewitt está ejecutado con tanta precisión que no resultará jamás un problema colocarlo.
La belleza de este logotipo se basa en la justa importancia de sus vacíos dentro del cuerpo de la forma.
Jackson Hewitt basa su éxito en la fuerza de su gama cromática que rompe el espacio convirtiéndose en protagonista.
Jackson Hewitt cohesiona a la perfección la imagen de un logotipo moderno y a la vez tradicional convirtiéndolo en atemporal.
De entre los logos que podrían convertirse en clásicos, Jackson Hewitt es de los aspirantes más aventajados por la exactitud de sus formas y peso.